Foto: imagen de campos del Sobrarbe. Sobrarbe Digital.

La campaña de prevención y extinción de incendios forestales ya está en marcha. Aragón cuenta con más de 1200 efectivos distribuidos en todo el territorio para acometer las tareas de extinción que en cada momento se precisen, “empleando la máxima fuerza en el primer ataque para que contribuya a la pronta extinción de un incendio, y evitar su propagación” ha declarado el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Modesto Lobón, durante la presentación de la campaña de 2014.

El operativo se compone por las 62 cuadrillas terrestres, las 8 cuadrillas helitransportadas, en las que se ven implicadas 860 personas, 9 medios aéreos, 39 vehículos autobomba, 80 puestos fijos de vigilancia, y 327 APNs que juegan un papel decisivo en los primeros momentos como directores de extinción, entre otros efectivos.

Hay que contar, además, con los medios que el Ministerio dispone para reforzar el operativo en la época estival de mayor riesgo. Este año se cuenta con 1 helicóptero bombardero Kamov con base en Plasencia del Monte, 1 Brigada de Refuerzo en Daroca, 2 aviones anfibios y una unidad móvil de meteorología y comunicaciones.

Es la situación meteorológica, por el mayor o menor riesgo de incendios que conlleva, lo que hace planificar de un modo u otro el operativo de prevención y extinción. “Por ello, dadas las circunstancias especiales que se vivieron en la segunda quincena del mes de mayo, se tomó la decisión de adelantar quince días el periodo de máximo riesgo de incendios”, ha asegurado el director general de Gestión Forestal, Roque Vicente. De este modo, se ha modificando la tradicional fecha de activación de la FASE III (máxima activación de medios).

Y es que la Comunidad Autónoma de Aragón sufre unas condiciones de sequía acumulada que sitúan el nivel de riesgo de incendios forestales por encima de los niveles medios habituales, siendo ésta una situación especialmente preocupante en la mitad sur de la comunidad autónoma: Sistema Ibérico Zaragozano y Turolense.

En este escenario, cobra una especial relevancia la colaboración ciudadana a la hora de avisar de las incidencias e incendios forestales que se produzcan, y sobre todo, para no realizar actividades que puedan generar riesgo de ignición.

Hasta el 31 de mayo de 2014 se han producido en Aragón 212 incendios, que han afectado a 240 ha forestales, 39 de ellas arboladas. Si estos datos se comparan con los relativos al año 2013, se observa que en 2014 el número de incendios ha aumentado en un 66% y la superficie afectada en un 28%. De los 212 siniestros, 38 correspondieron a la provincia de Huesca, 113 a Zaragoza y 61 a Teruel.

Respecto a los datos de causalidad en un 60% de los casos, el incendio ha sido ocasionado por una negligencia o accidente, destacando aquellos derivados de quemas agrícolas, que han supuesto el 71 % de las negligencias.

Una de las piezas clave de la dirección general de Gestión Forestal se sustenta en la propia gestión forestal. “Los cambios legislativos tratan de facilitar la apertura del monte para todos los usuarios, simplificar los procedimientos y los mecanismos, eliminar duplicidades, fomentar los aprovechamientos e incrementar el dinamismo del sector para generar riqueza siempre a partir de una gestión sostenible”, ha declarado Lobón.

Además, ha informado que se han realizado 12.000 aprovechamientos desde que comenzó la presente legislatura, lo que ha conseguido movilizar entre 30 y 35 millones de euros. “Hay que destacar, de todos ellos, la extracción de 410 toneladas de madera, lo que ha permitido crear 333 puestos de trabajo en Aragón. El 60 por ciento de esta madera va destinada a la biomasa”, ha recalcado el consejero.