Aínsa abre las puertas de su matadero municipal con sello ecológico para dar impulso a la industria ganadera del territorio.
Aínsa-Sobrarbe es un municipio intrínsecamente comprometido con el desarrollo sostenible socioeconómico y ambiental. En los últimos años, realiza una fuerte apuesta por la promoción del producto agroalimentario ecológico como futuro de la industria ganadera y agrícola en la región.
Es por ello, que a través de uno de sus múltiples proyectos apoyados por la Comisión Europea mediante las ayudas del CEDESOR, con una subvención de 60.000 euros para el desarrollo y dinamización del sector agroalimentario, identificó la relevancia de generar infraestructuras de calidad públicas facilitadoras para la transformación del producto cárnico bovino, ovino y caprino en ecológico que refuerzan los vínculos de colaboración público-privados.
El matadero de Aínsa es un proyecto sostenible comprometido con la reducción de la reducción de la huella de carbono, brindando a los ganaderos de la zona unas instalaciones optimas que evitan largos desplazamientos, un factor que además incide directamente en el bienestar animal al eliminar el estrés del viaje.
El matadero supone una pieza clave en la cadena de distribución del producto fresco de Km0 en los comercios y carnicerías locales, pues supone un abastecimiento de carne para los consumidores de la zona. A ello hay que sumarle el hecho de que promueve la fijación de población en el territorio a través de la creación de empleo estable y de calidad.
Además, a través del convenio con la Fundación Quebrantahuesos los restos se donan al comedero de aves necrófagas del municipio, aprovechando al máximo los recursos y cerrando el ciclo en todos los sentidos.
En pocos días y tras la finalización de unas obras de remodelación que han contado con un presupuesto de 105.000 euros, abrirá sus puertas el matadero ecológico de gestión pública que más producirá en la Comunidad Autónoma de Aragón.