- Últimas incidencias registradas, según datos facilitados por el Gobierno de Aragón.
Hasta las 21:30 horas, del lunes 28 de abril, la sala del 112 había registrado las siguientes incidencias:
-Más de 900 llamadas.
-26 rescates en ascensores.
-Se había solicitado gasoil para los hospitales Clínico Universitario Lozano Blesa, Centro Neuropsquiátrico Nuestra Señora del Carmen, y la residencia de mayores Elías Martínez.
-La residencia municipal San Pedro, en Zuera, había solicitado el traslado de 15 ancianos.
-17 personas habían solicitado oxigenoterapia.
-1 enfermo de ELA había pedido un generador eléctrico para alimentar sus equipos sanitarios.
-Se estaba prestando ayuda, además, a los usuarios de los AVE detenidos en Plasencia (alrededor de 900 personas) y en los trenes convencionales parados en Mallén (107), Luceni (160) y Chiprana (25).
-El helicóptero del 112 ha realizado el reconocimiento de la línea del AVE entre Zaidín y Alhama para localizar los AVE parados, que además 1 persona embarazada ha sido trasladada por el 061 desde Zaidín.
-Una pasajera que estaba en Calatayud ha tenido que ser trasladada en ambulancia del 061 al hospital por encontrarse enferma
-La residencia comarcal de Illueca ha solicitado 15 balas de oxígeno
-La residencia de La Puebla de Alfindén ha solicitado combustible para su generador.
Evolución de la emergencia por el apagón
El primer paso del Gobierno de Aragón ha sido activar el plan territorial de emergencias de Aragón (Platear) en fase de emergencia nivel 1 ante el apagón ocurrido en torno a las 12.30. De la misma manera, también se ha activado el CECOP con el fin de hacer el seguimiento de la emergencia. En esos primeros momentos, el Ejecutivo aragonés contactó, además, con hospitales y residencias para conocer sus posibles necesidades.
La primera medida tomada fue la puesta en funcionamiento de grupos electrógenos en el ámbito hospitalario, lo que permitió mantener la actividad que no se podía suspender (intervenciones quirúrgicas que se están realizando en ese momento, mantenimiento de las unidades de cuidados intensivos o mantenimiento de sistemas de ventilación en zonas de aislamiento, entre otros sistemas).
Otra de las acciones que se llevó a cabo a última hora de la mañana de este martes fue solicitar más combustible para disponer de reservas suficientes en los grupos electrógenos, ante la incertidumbre de la duración de la falta de suministro. De esta manera, el Hospital Miguel Servet quedó dotado con 12.000 litros para contar con suficientes reservas, y al Clínico Lozano Blesa, con otros 10.000 litros.
A las 14.36 y ante la importancia de la situación, el Gobierno aragonés decidió subir a nivel 2 el Plan Territorial de Emergencias (Platear), lo permitió contar con medios de la Administración General del Estado.
A las 16.50, en los centros de salud de Huesca ya había vuelto la normalidad. Algún centro rural aún tenía problemas de falta de suministro eléctrico en esos momentos, pero en la mayoría ya se había restablecido el servicio.
Hasta las 17 horas, el Ejecutivo aragonés había registrado las siguientes incidencias:
-436 llamadas.
-26 rescates en ascensores.
-Se había solicitado gasoil para los hospitales Clínico Universitario Lozano Blesa, Centro Neuropsquiátrico Nuestra Señora del Carmen, y la residencia de mayores Elías Martínez.
-La residencia municipal San Pedro, en Zuera, había solicitado el traslado de 15 ancianos.
-15 personas habían solicitado oxigenoterapia.
-1 enfermo de ELA había pedido un generador eléctrico para alimentar sus equipos sanitarios.
-Se estaba prestando ayuda, además, a los usuarios de los AVE detenidos en Plasencia (alrededor de 900 personas) y en los trenes convencionales parados en Mallén (107), Luceni (160) y Chiprana (25).
A las 17.00, tuvo lugar una nueva reunión en la sede de crisis del 112, en este caso, del CECOPI. Durante la celebración de la misma, se informó de que los hospitales de Aragón estaban recuperando la normalidad y el suministro eléctrico ya había llegado a todos los centros sanitarios principales de la comunidad a excepción de los hospitales de Calatayud, Teruel y Alcañiz, que en cualquier caso continuaban perfectamente asistidos por grupos electrógenos.
Tras la reunión del CECOPI, y una vez había comenzado a recuperarse el servicio eléctrico en la comunidad, el presidente Azcón confirmaba a los medios de comunicación que “la mayor preocupación en ese momento era atender a las personas que habían quedado atrapadas en trenes de larga y media distancia.
Igualmente, Azcón hacía alusión a la “necesidad de que los aragoneses” permanecieran en sus domicilios y mantuvieran “la calma en todo momento”.