Coscojuela de Sobrarbe ha acogido, este fin de semana, el festival En Clave de Aragón, que llega a su quinta edición consolidando su oferta cultural y agroalimentaria.
Se trata de un festival, que nace en el Sobrarbe en 2017, itinerante que se lleva a cabo en pueblos singulares afectados por la despoblación.
Vecinos y visitantes han podido disfrutar durante dos días de una amplia programación cultural y gratuita; todo ello arropado además por una veintena de comerciantes que han mostrado sus deliciosos productos artesanos.
La iglesia de la Asunción, la plaza, las plazoletas y las eras, se han convertido durante el tercer fin de semana de septiembre, en un escenario cultural, pero poniendo el foco en abordar de manera positiva y constructiva la situación de los pueblos aragoneses afectados por la despoblación.
“Buen tiempo y multitud de personas se han acercado al festival”, ha manifestado satisfecho Arturo Gastón, coordinador de En Clave de Aragón.
El “fuerte” de la Cooperativa de Estadilla es el cereal, sin embargo comercializan un aceite virgen extra de Aragón. “Un producto muy bueno, al final hay que estar con los mejores y hay que defender la bandera de Aragón”, ha manifestado Alfonso.
Después de cinco años se ha conseguido que En Clave de Aragón se celebre en un municipio de Aínsa, ha comentado el alcalde Enrique Pueyo. Hay que recordar que Coscojuela de Sobrarbe fue una de las localidades más afectadas por la creación del embalse de Mediano, entre el 1950 y 1970. Por ese motivo, ha sido importante que el festival haya rendido un homenaje a las pocas familias que se quedaron en un pueblo que ahora es ejemplo de dinamismo.
Enrique Pueyo, alcalde de Aínsa.
Algunas de imágenes de la jornada de este domingo
Las cuatro casas homenajeadas han sido Juste, Arnal, Campo y Garcés, que resistieron a la expropiación debido a la creación del embalse de Mediano.
Y también se ha reconocido la labor del Restaurante Casa Falceto.