El nuevo año expositivo de la Diputación de Huesca (DPH) va a estar protagonizado por una visión inédita del reconocido fotoperiodista Gervasio Sánchez, la pintura de fray Manuel Bayeu, una de las figuras más emblemáticas de la Cartuja de las Fuentes, además de contar con el talento de prometedoras artistas y la pluralidad de lenguajes en las exposiciones itinerantes por el territorio. A ello se refería la responsable provincial de Cultura, Berta Fernández, en el transcurso de la presentación donde también ha dado a conocer los datos de participación del pasado año, que se traducen en prácticamente 51.500 visitas.

El programa continúa con la estela del trabajo bien hecho que deja 2017, que ha superado todas las expectativas, ”la acogida de todas estas iniciativas es cada año más sorprendente, con cifras que no paran de crecer y que demuestran que Huesca es una provincia enamorada del arte con un 50% más que en años anteriores”. Como apunta la diputada responsable de Cultura, Berta Fernández. Cerca de 30 propuestas, la parcela de didáctica y formación aparejada a todas las actividades.
Berta Fernández.

Todavía queda una mes para que cierre sus puertas la retrospectiva de Marcelino Orbés, una de las más significativas de los últimos tiempos por su significado y por la respuesta del público, a la que seguirá como preámbulo al Congreso de Periodismo Digital, el 7 de marzo, la apertura de Vida, una recopilación de fotografías inéditas de Gervasio Sánchez en muy diversos tiempos, lugares y contextos.

Aunque habitualmente sus exposiciones ponen el objetivo en los conflictos que ha recorrido a lo largo de su carrera, “aquí la mirada va a estar puesta en su faceta de artista de la imagen”, como ha apuntado Teresa Luesma, técnico de artes plásticas de la DPH, quien ha estado junto a Berta Fernández y ha adelantado el planteamiento de una propuesta que va ,ás allá del drama de la muerte y se presenta como un reportero de vida, del triunfo de la vida sobre la violencia destructora, algo que también estará presente en la larga lista de actividades paralelas.

Fotos: DPH. Pablo Otín

Con la llegada del periodo estival, en concreto del 15 junio al 16 de septiembre, el programa toma un nuevo rumbo y se centra en la figura de Fray Manuel Bayeu, cartujo, pintor y testigo de su tiempo para dar respuesta al interés que suscita este personaje, tanto por su trayectoria vital como por la actividad artística, y la propia historia de la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes.

Se expondrá una amplia colección de cuadros hechos para este monasterio y para otros lugares de Aragón y de Mallorca y obras de otros artistas entre los que se encuentra Francisco de Goya. Un panorama pictórico que se completa con diversos grabados, objetos, cartas, documentos y fotografías, y darán buena cuenta no solo de los aspectos biográficos más relevantes del artista, sino también de las costumbres y mentalidad de la sociedad española de la época que a Bayeu le tocó vivir.

El mes de octubre y hasta el 18 de noviembre está reservado para la Beca Ramón Acín y Gema Rupérez, será entonces cuando se pueda ver el resultado del proyecto en el que anda inmersa, Líneas de Resistencia. En esta exposición el punto de partida es el meridiano de Greenwich, la línea imaginaria más famosa del mundo y su paso por Huesca servirá para explicar el contexto demográfico de la provincia tras una investigación de líneas imaginarias, puntos y vacíos para acercarse a la densidad territorial tan característica del territorio altoaragonés.

Y en esta línea se cerrará el año, con la reflexión en torno a uno de los grandes problemas en España y especialmente en la provincia de Huesca: la despoblación, el nuevo viaje que emprende el Programa de la Imagen, Visiona. Será a partir del 30 de noviembre y este tema se abordará como una circunstancia del territorio y su población, pero también desde otros puntos de vista tanto geográficos como poblacionales, culturales, económicos, políticos, históricos o sociales. En esta reflexión tendrán cabida las causas, consecuencias y realidades directas de la despoblación en determinados territorios, como puede ser la aparición en la década de los 60 en Europa occidental y Norteamérica del fenómeno del neoruralismo y su posterior aparición en España en la década de los 80.

Claves de la buena respuesta: la colaboración y las actividades
En lo que se refiere al balance de la actividad de artes plásticas, Berta Fernández atribuye las causas de un año excepcional a diversos factores entre los que destaca la colaboración y el soporte que se mantiene con todas las instituciones públicas y privadas de la provincia y cita al Museo Provincial, el CDAN, las distintas salas municipales, el museo Diocesiano o las salas privadas. La buena coordinación entre los organismos culturales no es el único motivo, Fernández apunta como la clave a “una programación variada y plural en cuanto a los lenguajes artísticos y también a la procedencia y trayectoria de los artistas, hemos combinado las disciplinas alternando propuestas más ligadas al patrimonio, con otras mucho más vanguardistas”.

Otras de las razones para que cada vez más gente visite las salas de exposiciones son las actividades y las visitas guiadas que complementan las muestras. A lo largo de este año 2.500 personas, como ha explicado la técnico cultural Teresa Luesma, han conocido el arte a través de las actividades, que consiguen con sus dinámicas explicaciones crear hábitos de consumo cultural entre la población y, especialmente, entre la gente joven.

La programación de artes plásticas de la Diputación compagina las exposiciones temporales que se albergan en la ciudad de Huesca con las exposiciones itinerantes que durante todo el año recorren la provincia llevando el arte a 25 municipios de todas las comarcas. El interés en las zonas rurales es también significativo, con más de 11.000 visitantes que han podido disfrutar de estas muestras en algún punto de su recorrido.