Imagen reciente. Foto: SobrarbeDigital.
El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, ha mantenido un encuentro con los representantes de los municipios afectados por el desprendimiento en la carretera A-2609 entre Salinas de Sin y Plan, en las proximidades del punto kilométrico 1,2.
Durante la reunión, acompañado por el director general de Movilidad e Infraestructuras, José Gascón, se ha informado sobre las actuaciones a realizar en la zona para consolidar unos 150 metros de talud para evitar nuevos desprendimientos y mejorar la seguridad en la zona.
José Luis Soro, ha explicado que “además de actuar para la limpieza de la zona se quiere aprovechar para invertir un total de 325.000 euros y consolidar el talud y reponer los daños ocasionados en la carretera”. Los trabajos comenzarán de forma inmediata, ya que se ha considerado que es una obra de emergencia, y se prevé que puedan estar listos en unos tres meses, si bien se reconoce que la climatología puede hacer varias las primeras previsiones.
Entre las actuaciones necesarias que se llevarán a cabo están: labores de desprendimientos controlados, excavación de cimentaciones, relleno y compactación para cimentación de una estructura de contención, suministro y colocación de acero, relleno de trasdós de estructura de contención, colocación de mallas, reposición de los daños en cunetas y carretera y reposición de los elementos de defensa.
La zona presenta una elevada pendiente y una gran cuenca de recogida. En las fechas en las que se produjo el desprendimiento se acumularon un total de más de 500 litros/m2 en varios días lo cual provocó una excesiva entrada de agua en el talud desestabilizándolo y provocando su caída. Soro ha defendido la labor del personal de la Dirección General de Movilidad e Infraestructuras “el desprendimiento se produjo sobre las 2 de la madrugada y el personal ya estaba en el lugar a las cuatro a.m. tomando decisiones y buscando las máquinas necesarias para actuar”.
Se recuerda que los trabajos comenzaron cuando hubo luz suficiente y descendió el nivel de riesgo de caída de material del alud. A las 9.00 horas ya estaba abierta la carretera de nuevo y se instaló un sistema de semáforos para dar paso alternativo.