A finales del pasado junio se recibían con expectación los dos primeros ejemplares de quebrantahuesos que formaban parte del programa europeo LIFE, cuyo objetivo es recuperar la población extinta de esta amenazada especie en el Maestrazgo turolense.
Este lunes por la mañana, la señal indicaba “inactividad” lo que motivó que el equipo técnico se desplazara a la zona de contacto encontrando el cuerpo sin vida del ejemplar macho “Sabino” bajo un tendido eléctrico propiedad de la compañía Endesa, según informan desde la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos.
Funcionarios del Gobierno de Aragón ha procedido al levantamiento del cadáver y activado su traslado al centro de referencia de la Alfranca de Pastriz en Zaragoza, donde un equipo de veterinarios y especialistas procederán a realizar la necropsia.
En estos momentos se está a la espera de los resultados para iniciar las acciones administrativas o legales que corresponda.
Diariamente, el equipo técnico del proyecto se ha encargado de documentar la evolución de los mismos mediante la observación directa de campo, y teledetección, todo ello gracias a la baliza satelital que porta cada uno de los ejemplares, y que permite tener diariamente, información sobre área de vuelo, periodos de actividad, pautas de alimentación, entre otros datos relacionados con la biología de la especie