Foto: aguas del río Cinca este 2015. SobrarbeDigital.

Una semana más el párroco Juan Diego Tamayo hace llegar a esta redacción, su homilía. ¡Muchas gracias!.

Por Juan Diego Tamayo Avendaño.

Es buenos saber que en muchos lugares atienden este pequeño espacio para meditar en La Palabra, saludo a quien se acerca desde mi América querida en Colombia y Estados Unidos. También saludo desde Boltaña, el lugar que me regala el Señor para acompañar en la fe y para quienes en España se acercan a Sobrarbe Digital. También para quien en Rusia, está tratando de vivir la Experiencia y se hace miembro de está familia de la Palabra que crece en El Señor Jesús, Saludos y bendiciones.

EL EVANGELIO para esta Semana.

 LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN 1, 35-42

En aquel tiempo estaba Juan con dos de sus discípulos y fijándose en Jesús que pasaba, dijo:

–Este es el cordero de Dios.

Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús, Jesús se volvió y al ver que lo seguían, les pregunto:

–¿Qué buscáis?

Ellos le contestaron:

–Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?

Él les dijo:

–Venid y lo veréis

Entonces fueron, vieron donde vivía y se quedaron aquel día, serían las cuatro de la tarde.

Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús; encontró primero a su hermano Simón y le dijo:

–Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo).

Y lo llevó a Jesús. Jesús se le quedó mirando y le dijo:

— Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que significa Pedro).

Palabra del Señor

Gloria a Ti, Señor, Jesús.

Nuestra fe tiene que estar puesta directamente en Dios;

por estos días en los que veo el buen momento por el que pasa nuestra Iglesia Católica -eso me llena de mucha alegría con el gran dolor, eso si, por lo que sucede en oriente con nuestros cristianos-, me pongo a pensar en lo positivo de ello, pero también en las cosas negativas que pueden estar afectando a quienes entran, regresan o reavivan su carisma cristiano y tienen mal orientada su fe…

…muchos sabemos que el Papa es la cabeza visible de la Iglesia, que es parte del cuerpo místico de nuestro Señor Jesucristo, pero, hay quienes, quieren olvidar que la Iglesia siempre ha estado asistida por la fuerza del Espíritu Santo y ella, toda ella – pecadora y santa – ha sido, en cada uno de sus miembros – buenos y malos – la que ha colocado su granito de arena para que estemos como estamos – en lo negativo y lo positivo -; solo pensemos en el echo de que por alguna razón faltara el Papa Francisco(Dios le de larga vida), se pueden imaginar la reacción de ese grupo que tiene puesta sus esperanzas en una revolución eclesial? O de quienes esperan ver a su Santidad como un renovador que pase por encima de las verdades de la fe? Y si no llegase tan lejos y vemos la realidad de lo que va a suceder, cuando el Papa siga firme en la experiencia Cristiana Católica, orientando eso si, muchas de las vivencias de nuestro discipulado.

…Hay muchos que entran o regresan a esta Iglesia Nuestra esperando una Iglesia que borre sus principios y los reescriba en los caprichos del mundo, y ellos y todos nosotros, tenemos que saber que sigue siendo y es el tiempo de Cristo y nuestra mirada, tiene que seguir fija en Él, los demás, somos colaboradores de su obra y para ello, todos tenemos que tomar el ejemplo de quienes son testigos; como su Santidad, pero sin mirar las fracturas que se puedan dar; nosotros los cristianos católicos tenemos que seguir invitando al mundo a vivir el mandamiento del amor.

No es ya el tiempo para pensar “¿será que antes de que el Papa tome ciertas decisiones: ¡¡¡se lo cargan!!! que pasará entonces?”. Es el tiempo para pensar que todos y cada uno tenemos una misión y que no podemos dejársela a uno solo. Si, acompañemos al Papa, acompañemos la Iglesia, acompañemos a Jesucristo, El, Es el Señor; vale la pena, amemonos los unos a los otros y acerquémonos a la salvación sin fanatismos. Invitemos a las otras religiones, filosofías y demás – con nuestro ejemplo – al amor. Aquí no se trata de ir a favor o en contra de el que piensa como el uno o el otro, aquí debemos vivir al Servicio de la verdad. Miremos a Jesús, miremos “–Este es el cordero de Dios.” para que Ël; como a Nuestro Papá, nos diga a nosotros: “– Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que significa Pedro)”, para nos diga que somos los “Cefas” del siglo XXI.

Una Feliz Semana para Todos.

Canción y fondo tomado de la Hermana Glenda, sus vídeos a seguir:

https://www.youtube.com/watch?v=GD5jitalF90 y https://www.youtube.com/watch?v=5NJrpixP93E

AUDIO: Juan Diego Tamayo Avendaño.