Desde la pequeña localidad jacetana de Borau, la Diputación Provincial de Huesca (DPH) comienza la extensión de la banda ancha en una puesta en servicio sin precedentes en el país al llegar a otras 320 poblaciones rurales de una media de cien habitantes que podrán tener una segunda oportunidad.
La implantación se realizará en menos de dos años cuando, como ha puesto de manifiesto el Presidente de la DPH, “por primera vez prácticamente todo un territorio estará conectado a alta velocidad”, con 100 megas en los cascos urbanos y más de 30 en las zonas diseminadas.
Ante la mayor oportunidad de ofrecer el mismo servicio a una empresa y a cualquier persona desde un pueblo de 20 habitantes que en los principales centros de población, el Presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia, y la Consejera de Innovación, Investigación y Universidad del Gobierno de Aragón, Pilar Alegría, han trabajado conjuntamente en este ambicioso proyecto público que hoy han coincidido en asegurar que “nos hace más iguales”, de forma que “quienes quieran vivir en un pueblo puedan hacerlo en las mismas condiciones y con los mismos derechos”, han destacado ambos.
Pilar Alegría.
En total serán 4,5 millones de euros dirigidos al medio rural, para lo que la DPH cuenta con la cofinanciación de los fondos europeos FEDER. En un acto que marcará el futuro de los pueblos altoargoneses y donde también ha participado el alcalde de Borau, Daniel López, el director general de Embou, Jorge Blasco, y una nutrida presencia de responsables municipales, agentes del territorio y vecinos, Miguel Gracia les ha dicho que “no tenemos competencias en este ámbito pero sí incumbencia” porque “si queremos gente en los pueblos, invertir la tendencia de población, para eso tiene que haber vivienda y trabajo, y eso es impensable en una sociedad como la actual sin una red donde también se mueve la economía“.
Miguel Gracia.
“Hoy Aragón, la provincia de Huesca es un ejemplo para toda España”, es lo que ha dicho la consejera Pilar Alegría a la vez que hablaba de la conectividad como principio básico en cualquier parte del territorio y de la coordinación entre instituciones para resultados como este. A este respecto Miguel Gracia también ha querido poner el acento en el papel del legislador para reclamar “la necesidad de contar con un informe demográfico de toda la legislación”.
Con el calendario presentado, alrededor de 50 localidades tendrán el servicio ya implantado el próximo mes de marzo, en los seis primeros meses se llegará a más del 30% y en nueve prácticamente a la mitad y así hasta contabilizar en el primer año más de 200 nuevas localidades conectadas.
Un año y ocho meses es lo previsto para finalizar en las 321 localidades -con al menos 20 vecinos- en un despliegue que sobre todo será ágil. A mediados de diciembre comenzará el trabajo sobre el terreno de la operadora aragonesa Embou, adjudicataria del servicio, en esta zona de la Jacetania e irá dotando de una instalación de fibra óptica y de forma simultánea a todas las localidades mientras que para cubrir las viviendas fuera del núcleo urbano habrá otra red vía radio utilizando la tecnología WiMAX o LTE.
Tal como explicaba el director general de Embou, Jorge Blasco, para la operadora “es un reto este novedoso despliegue que conlleva de 14 a 16 localidades al mes y de forma simultánea en pequeñas localidades que de media tienen 96 habitantes” para lo que también ha pedido a todos los ayuntamientos presentes su colaboración “para poder hacerlo lo más rápido posible”.
En todos los casos son núcleos que no disponen de cobertura de nueva generación ni tampoco previsión de tenerla en los próximos años, los más de 30.000 habitantes de estas poblaciones van a pasar del aislamiento a la conexión. En el conjunto de Aragón se podrá hablar de haber conseguido llegar a más de 900 localidades en los últimos tres años.
Una oportunidad para el despegue de Borau
Borau, a camino entre el valle del Aragón y el de Aísa, ha sido hoy la voz de uno de tantos pueblos de origen agrícola, ganadero y forestal que quiere despegar turísticamente con hasta siete viviendas de turismo rural, empresas de turismo activo y una recién creada red de senderos. Tal como explica el alcalde, Daniel López, en los últimos años ha apostado decididamente por acabar con la renovación de las redes de abastecimiento, la pavimentación de las calles y modernizar los espacios públicos. “Ahora con la llegada de la banda ancha nos va a permitir pasar a otra fase, a crear economía en el municipio” donde, ha adelantado, “tenemos un proyecto de viviendas sociales para hacer más fácil que nuevas familias vengan y se asienten”.
Hace más de una década lo hizo David Ruiz que dejó Zaragoza y vive en Borau donde ha creado su propia empresa de turismo de activo, en el caso de Luis Sarasa decidió quedarse en este pueblo con una casa de turismo rural y la enfermera Lourdes Cavero viene cada semana al consultorio, son facetas que se verán beneficiadas y que hoy también hacían públicas las dificultades de conexión hasta ahora.
Por encima de la media en acceso a la banda ancha, es momento de llegar a todo el territorio España es uno de los países más avanzados en cuanto a banda ancha, con la tercera red de acceso más extensa de fibra entre los países de la OCDE, y la provincia de Huesca parte de una posición por encima de la media, entre el 60% que accede a un rango de hasta 50 megas. El problema es que quedan fuera los pueblos más pequeños y aislados por la orografía.
A través de unas de las iniciativas más importantes de las últimas décadas, la DPH se convierte en la primera diputación en llevar a cabo un plan de estas dimensiones y vuelve a apostar por el desarrollo conjunto del territorio y no solo de puntos aislados. Lo hace en coordinación con la DGA y el ConectAragón al que solo le quedan 6 ó 7 puntos por llegar y también con las nuevas prioridades del Ministerio hacia lo rural ha sido posible trabajar de forma conjunta.
Esta conexión puede dar crecimiento en todos los sentidos, en el ámbito del ocio por ejemplo el servicio de banda ancha también va a equiparar al medio rural oscense con las grandes ciudades teniendo en cuenta que plataformas como Netflix necesitan al menos 30 megas, algo impensable a día de hoy.
El complejo proceso hasta ver el plan hecho realidad
Arranca después de una compleja tramitación administrativa a la que ha tenido que hacer frente la Diputación por el importe, la necesaria coordinación con otras administraciones y lo novedoso de este tipo de concurso. El plan se aprobó en pleno a finales de abril del año pasado, después hubo que esperar cuatro meses de tramitación por parte del anterior Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital para superar favorablemente todos los informes y en marzo pudo arrancar una compleja contratación a escala europea.
En octubre se adjudicó y acaba de firmar el contrato la operadora Embou, perteneciente al grupo MásMóvil y con amplia experiencia en este tipo de proyectos caracterizados por lugares de baja población y con una orografía técnicamente compleja. Para conocer todo el proceso, se irá publicando la lista de municipios activos conforme se vaya desplegando la red, las características y coste de contratación para el cliente final de cada uno de los servicios ofrecidos y las fechas previstas de inicio de explotación de la red en cada una de las poblaciones.