Imagen facilitada por la Comarca de Sobrarbe.

Un año más, el Geoparque Mundial de Sobrarbe ha organizado un programa didáctico para los escolares de Sobrarbe, destinado a promover el conocimiento de la población local sobre los bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial y sitos en el Geoparque, prestando especial atención al papel que ha jugado la cultura pastoralista en la construcción de nuestro patrimonio cultural, y a la arqueología, como una de las ciencias que nos permite aproximarnos a este conocimiento.

Esta actuación se enmarca dentro del programa “Estudio y Difusión del Pastoralismo en el bien Pirineos Monte Perdido II” financiado al 75% por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de España, desarrollado por la Comarca de Sobrarbe a lo largo de 2016, y es uno de los actos de la Semana de la Red Europea de Geoparques.

Se trata de una actuación de difusión entre la población local con la que se pretende llegar a un rango de público muy amplio, que comprende a más de 450 escolares de Educación Infantil y Primaria de Sobrarbe, a sus familias y a medio centenar de docentes.

Los escolares y sus profesores podrán disfrutar de una jornada de actividades en Pineta, valle de origen glaciar incluido en la delimitación del Bien Pirineos Monte Perdido- Patrimonio Mundial junto con otros sectores españoles (Ordesa, Añisclo, Escuaín) y franceses (Gavarnie, Estaubé, Troumouse y Barroude).Todo este territorio transfronterizo comparte una herencia cultural común. Se trata de una misma área cultural que se ha desarrollado, desde la Prehistoria, en base a comunidades con un modo de vida agro-pastoril.

Como en años anteriores, la cultura agro-pastoril será la protagonista de los talleres. En las pasadas ediciones se ha trabajado diversos temas como las formas de vida prehistóricas, el arte rupestre, el tratamiento del ganado, la vida del pastor, las leyendas, etc. Este año, prestaremos especial atención a la botánica. En la cultura tradicional agro-pastoril de Sobrarbe, el conocimiento de las cualidades alimenticias, curativas, paliativas o tóxicas de las plantas del entorno jugaba un papel central.

Los hombres y las mujeres adquirieron a lo largo de los años un profundo conocimiento sobre las posibles utilidades de las diferentes y variadas especies vegetales que podían encontrar en el territorio en que habitaban.

Este conocimiento ancestral, que comenzó en la Prehistoria, fue transmitido de generación en generación y forma parte del patrimonio cultural inmaterial del Bien Pirineos Monte Perdido, ligado a la cultura tradicional agro-pastoril que le es propia.

Este programa trata de conseguir que los alumnos conozcan la interrelación estrecha que, en las formas de vida tradicional, existía entre el ser humano y la naturaleza en este territorio, a través del ejemplo claro de la utilización de las diferentes especies vegetales para el aprovechamiento humano: desde las plantas comestibles, las usadas por los pastores como cuajo para hacer el queso, hasta las hierbas para sanar a las ovejas de sus diferentes males, las que se usaban para crear remedios, ungüentos y cataplasmas para el ser humano o las que se utilizaban como amuleto o símbolo protector.

Gracias a la inestimable colaboración de los equipos docentes de los centros, los alumnos del colegio de Paules de Sarsa disfrutaron de esta actividad la semana pasada, y el resto de escolares lo harán en los próximos días 16, 17 y 18 de mayo.