Interior del monasterio.

El Gobierno de Aragón intervendrá este año en el claustro y acometerá el acondicionamiento del acceso del Real Monasterio de San Victorián, actuaciones en las que se invertirán 50.000 euros.

El Ejecutivo autonómico mantiene así su compromiso con este monumento de gran valor histórico y artístico, que se ha convertido en uno de los principales focos turísticos de la Comunidad, y al que ha destinado desde el año 2005 más de un millón de euros.

En ese año, comenzaron una serie de trabajos de consolidación de sus estructuras, a los que siguieron el acondicionamiento del conjunto para visitas guiadas y actuaciones en el refectorio y la biblioteca. Posteriormente, ya en 2017 se intervino en las murallas y el torreón perimetral y se recuperó el antiguo camino del Real Monasterio.

Monasterio de San Victorián. Foto: SobrarbeDigital.

Un año después, se efectuaron actuaciones de acondicionamiento y seguridad necesarias para la incorporación de nuevos espacios del Monasterio al recorrido de las visitas guiadas, en concreto, la zona de los Huertos del cura y de las monjas, sus recintos y recorridos anexos. Se procedió de esta forma a la eliminación de la vegetación en fábricas, desbroce y desescombro en suelo, control y seguimiento arqueológico, cosido de grietas en muros, consolidación y refuerzo de bóvedas, consolidación de jambas y dinteles en arcos y vanos, reapertura de vanos cegados, entre otras actuaciones, por un importe de 20.000 euros.

En ese mismo 2018, se destinaron otros 20.000 euros a la mejora de la iluminación del templo, gracias a un acuerdo con Red Eléctrica de España, que mejoró la visibilidad en el interior de la torre y el monasterio. Así, se dispuso una línea eléctrica que parte del exterior del edificio de la hospedería y llega hasta la torre, tras discurrir soterrada por el patio principal y el claustro. Las luminarias empleadas son de led y bajo consumo y están orientadas para no provocar deslumbramientos ni contaminación lumínica. Estas actuaciones se complementarán con las obras previstas para este año.

El Real Monasterio lucirá así en las mejores condiciones para recibir a los visitantes que se desplacen hasta allí, justo en el mes en el que se han reiniciado las visitas guiadas al conjunto.

Precisamente hoy, el Gobierno de Aragón ha firmado un convenio junto a la comarca del Sobrarbe y el Ayuntamiento de El Pueyo de Araguás para asegurar y retomar estas visitas, que tuvieron que suspenderse con motivo de la pandemia.

Momento de la firma.

Gracias a este acuerdo, se garantiza la organización de estas visitas guiadas hasta el próximo mes de diciembre, dando continuidad a esta iniciativa que se puso en marcha en 2016.

Para ello se destinará un presupuesto de 12.500 euros: 10.000 de ellos los aportará Turismo de Aragón; El Ayuntamiento de El Pueyo de Araguás invertirá los restantes 2.500; mientras la comarca del Sobrarbe se compromete a la contratación del personal necesario para las visitas y la edición del material necesario para las mismas.

Merced al acuerdo suscrito hoy entre el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci; el gerente de Turismo de Aragón, Alfonso Salillas; el presidente de la comarca del Sobrarbe, José Manuel Bielsa Manzano; y el alcalde de El Pueyo de Araguás, José Ramón Lafuerza, el monumento contará con una serie de visitas guiadas que se realizarán en dos pases diarios a las 11:30h. y las 13:00h.

En el mes de julio están programadas de miércoles a domingo, en agosto de martes a domingo, en septiembre todos los domingos, en octubre todos los domingos y el día 12, en noviembre todos los domingos y el día 2 y en diciembre los domingos 6 y 13 y los días 7 y 8.

El convenio contempla también la realización de un mínimo de dos visitas teatralizadas y al menos dos juegos de pistas destinadas al público familiar. El precio fijado para estas actividades asciende a dos euros en el caso de las visitas guiadas, cuatro euros para las visitas teatralizadas y un euro para el juego de pistas y el resto de actividades que se pudieran programar.

El objetivo del acuerdo es poner en valor este monasterio, que cuenta con la calificación de Bien de Interés Cultural desde marzo de 2002, en la categoría de monumento. De esta forma se fomenta el turismo cultural en Aragón y la difusión del patrimonio cultural de la comarca y el municipio en el que se enclava, además de favorecer la contratación de personal, generando empleo directo en la zona.

Por otra parte, el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, ha anunciado la realización de un estudio arqueológico e histórico sobre este monumento.

Además de todas estas actuaciones, que quieren impulsar el turismo en la zona, El Pueyo de Araguás ha creado una red de senderos que potencian el conocimiento del municipio y sus alrededores y que se han dividido en senderistas, especializadas para bicicleta y temáticas.

Entre ellas, se encuentra una nueva diseñada por el ayuntamiento en colaboración con  Zona Zero y que alcanza las pareces verticales de la Peña Montañesa atravesando un arco de roca llamo La Portaza.

Imagen de La Portaza.

O la del refugio de los maquis en Peña Montañesa, un camino histórico que fue recuperado hace dos años con la colaboración de la Diputación Provincial de Huesca. Precisamente, y en relación con este sendero, se enmarca el descubrimiento realizado hace un par de años en la Peña Montañesa de objetos y documentos del maquis que se refugiaba en la zona y que custodia el consistorio.

El Real Monasterio de San Victorián constituye un conjunto arquitectónico monacal del siglo XVI formado por diferentes construcciones, ubicado en un lugar montañoso y aislado y rodeado por un recinto amurallado. El recinto del monasterio se compone de una Casa Abadía, una Hospedería y dos construcciones rectangulares entre sí y dispuestas en torno a un espacio abierto con una fuente y una cruz. En el centro se dispone el claustro de la comunidad, cuya crujía oriental es el único vestigio de la construcción medieval sobre la que se levantó el nuevo monasterio.

La iglesia, del siglo XVIII, tiene tres naves, en origen cubiertas por una bóveda de cañón con lunetos encamonada, y cabecera recta. Adosada a la iglesia destaca una gran torre de planta cuadrada y dos cuerpos en altura, tras la cual se encontraba el cementerio.