El actor Alfonso Palomares y los vecinos de Lecina.

Última semana para conseguir que la Carrasca de Lecina sea el primer árbol de España que obtenga el título europeo. El plazo para votar finaliza el próximo 28 de febrero. 

La carrasca de Lecina afronta la última semana del concurso para elegir al Árbol Europeo 2021 en primera posición, con un total de 66.461 votos. Este será el último número que se conozca hasta la proclamación del ganador, entre los trece ejemplares finalistas de todo el continente, porque desde este martes las votaciones son ‘a ciegas’, enlace para votar: https://www.treeoftheyear.org/spain 

Los vecinos de Lecina, están más cerca de ver cumplido el sueño de que su encina milenaria sea el primer árbol de España en alcanzar este título europeo que lleva una década otorgándose. Pero la pugna sigue abierta con los árboles de la Federación Rusa (55.918) e Italia (51.838), de ahí que sea necesario mantener hasta el 28 de febrero el ritmo de votación reflejado por la candidatura española durante los últimos siete días, con una media de crecimiento del 8,3% y 4.151 votos diarios.

Carrasca milenaria de Lecina. Foto: SobrarbeDigital.

Uno de los motivos por los que la carrasca de Lecina fue seleccionada para este concurso europeo, que busca árboles con una historia interesante, fue precisamente su vinculación con las personas. El nuevo vídeo producido por TuHuesca narra la vida que hay tras el árbol y el paso de los años.

Es el cuarto video que promueve TuHuesca dentro de la campaña por la votación de la Carrasca de Lecina. Se introduce en el alma de casa Carruesco, la familia que durante generaciones ha velado por esta monumental encina que incluso para abrazarla hay que hacerlo en equipo, ya que se necesita estar acompañado de entre 3 y 4 personas porque solo el perímetro de su tronco mide 7,5 metros.

María Jesús y Felisa recuerdan cómo su padre, Nicolás Arasanz, “la quería como si fuera otra hija, que nadie se la tocara…” Hasta tal punto llegaron esos mimos y cuidados que, al ver el deterioro causado por quienes se subían a sus ramas, Nicolás “estaba desesperado, porque decía que se la estaban matando y se le ocurrió untarla con manteca de cerdo”. Se trata de una anécdota que cuentan a propios y extraños porque ambas hijas han crecido con el mismo empeño de que resistiera a los avatares del tiempo, junto a su hermana Silvia y a la madre, Isabel Peñart, que a sus 96 años es la vecina más longeva de Lecina. “El quería que la cuidaran, nuestro padre estaría muy contento del reconocimiento que está teniendo, como lo estamos todos en el pueblo”, aseguran las hijas.

Testigo de un pueblo rebosante de historia e ilusión

Esta legendaria carrasca que hoy luce simétrica y sorprende por su capacidad para adaptarse a los vaivenes del clima era el ejemplar más joven del encinar y el único que se salvó del carboneo intensivo en esta zona a mediados del siglo pasado. Los más veteranos recuerdan cómo en los duros inviernos llegaba a producir 600 kilos de bellotas que alimentaban durante meses a los animales, por eso también es conocida como La Castañera y sigue dando sus frutos.

En la memoria de los mayores del lugar también están otras escenas y otras épocas, cuando se iba en machos (bueyes) a cortarse el pelo al vecino municipio de Alquézar o se bajaba a lavar al río, donde había un molino con el que también se generaba luz en el pueblo, y principalmente cuando se luchaba por sobrevivir. Los de más edad recuerdan, al menos, tres gotas frías con aguas torrenciales que arrasaron todo a su paso y una acusada emigración que a punto estuvo de dejar despoblada la localidad.

Ahora, otra lucha vuelve a unir a todo un pueblo, logrando contagiar su ilusión al resto de la región aragonesa y a cientos de rincones de España para que voten y compartan que la Carrasca de Lecina quiere ser Árbol Europeo 2021.

La encina (Quercus ilex) siempre ha sido considerada un árbol sagrado y atesora todo tipo de leyendas. La historia de esta zona viene de muy antiguo, ya que en los alrededores de Lecina se descubrieron las primeras pinturas de arte rupestre prehistórico de la provincia, declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO. De arquitectura popular, se reconoce como el pueblo con más blasones de Sobrarbe e incluso fue señorío temporal del Obispo de Huesca hasta la desamortización de Mendizábal, son algunas páginas de su historia que gracias a esta candidatura son más conocidas.

Votaciones hasta el 28 de febrero en: https://www.treeoftheyear.org/spain