Copiloto. Fuente: Raquel Povar.
  • SoNna Huesca 2022, encara la recta final de su extenso programa con una mini gira musical por las comarcas de La Litera y Monegros que protagonizan Copiloto (Aragón), el dúo Maestro Espada (Murcia) y el grupo La Carrau (Francia).

La ermita de Santa Bárbara de Azanuy, el parque de la ermita de San Bartolomé en Altorricón y el Mirador del Saso de Lanaja serán sus últimos escenarios, antes de cederle todo el protagonismo a la Cartuja Nuestra Señora de las Fuentes de Sariñena en el esperado multitudinario cierre del festival.

Santa Bárbara de Azanuy.

La tercera edición del SoNna Huesca, que organiza la Diputación Provincial de Huesca, afronta a partir de mañana el penúltimo fin de semana de un intenso y amplio programa que se inició el pasado 8 de julio en Tamarite de Litera. Dos meses de programación que vivirán su penúltimo capítulo en la mini gira musical por las comarcas de La Litera y Monegros que protagonizan Copiloto (Aragón), el dúo Maestro Espada (Murcia) y el grupo La Carrau (Francia).

Groupe de musique “De la Crau”. Fuente: DPH.

Tanto la ermita de Santa Bárbara de Azanuy, como el mirador del Saso de Lanaja, debutarán como escenarios del SoNna Huesca; no así el parque de la ermita de San Bartolomé de Altorricón, que el año pasado albergó el recital “Sonando la Imagen”, de La Chaminera y el Mantel de Noa.

Copiloto en Azanuy

El concierto de Copiloto (Viernes, 2. 19.00 horas), nombre artístico del músico zaragozano Javier Almazán, es en realidad una reaparición. Tras cuatro discos editados y una carrera consolidada, el 13 de agosto de 2016, Copiloto se despidió de los músicos con los que había compartido sus últimos años, con la intención de dejar la música. Pero en los cinco años que siguieron, Javier Almazán vivió un cúmulo de circunstancias personales –muerte de su padre, divorcio- que le hicieron desempolvar su guitarra y comenzar lo que él considera “la segunda parte del partido”.

Volvía a haber cosas que contar e ilusión por crear melodías y grabarlas. No es sencillo arrancar un motor que lleva demasiado tiempo sin usarse; hace falta un buen mecánico. Y es aquí donde entra en escena el productor Edu Baos (León Benavente, Tachenko, Nacho Vegas…) que se lo ha hecho un poco más fácil.

El recital tendrá lugar en la ermita de Santa Bárbara, situada en las cercanías de Azanuy. Es un edificio de reciente construcción, sobre los restos de una ermita románica. El 4 de diciembre, festividad de la santa, se sube de romería y el Viernes Santo se realiza un vía crucis desde la parroquial hasta la ermita señalizado en catorce estaciones. Lo más especial de la ermita de San Bartolomé de Altorricón es que no está ningún promontorio que domine el paisaje, pero está rodeada de un parque forestal que la protege y crea un espacio ideal para observar el entorno desde la sombra.

Parque ermita San Bartolomé, en Altorricón. Fuente: DPH.

Maestro Espada en Altorricón

La tarde del sábado, la caravana del SoNna Huesca se desplaza hasta las inmediaciones de Altorricón para recibir a Maestro Espada (sábado, 3. 19.00 horas), un dúo de folk murciano repleto de texturas electrónicas que acaba de publicar su primer single, Murciana. Con la intención de acercar la tradición folclórica murciana a nuevos estilos como el folk anglosajón o la música electrónica, el dúo formado por los hermanos Alejandro y Víctor Hernández (Rey Lobo) llevan a su terreno la tradición murciana a ritmo de castañeta y sintetizadores.

Maestro Espada.

Para llevar a cabo su proyecto, los dos hermanos se han encontrado en estos últimos años con lutieres de Tarragona, Murcia y Lorca con el fin de conocer los instrumentos tradicionales y aprender a tocar, por ejemplo, la castañeta y la pandereta. A partir de ahí se dedicaron a explorar el Cancionero popular murciano antiguo.

De la Crau en Lanaja

El domingo, el mirador del Saso de Lanaja será el escenario, a partir de las 19.00 horas, del concierto de De la Crau (Francia). Samuel Karpienia, Manu Reymond y Thomas Lippens son los tres integrantes de De La Crau, un grupo occitano, del sureste francés, que hace honor a la última estepa de la Europa occidental, el Crau o La Crau, una población del distrito de Toulon, asentada en la antigua desembocadura del río Durance, donde anida la ganga, un ave estepárea, igual que lo hace en Lanaja.

Es en ese paisaje de mar abandonado bordeado de fábricas donde los tres músicos de La Crau han imaginado la banda sonora de su viaje. Parten de un canto provenzal que rasga el cielo, al que el contrabajo, las percusiones y el éxtasis furioso de la mandola responden con potencia y poesía. Actualmente exploran un surco labrado hace veinte años, no muy lejos de las fábricas, como una herida que seguirán tratando para siempre, y que el canto y la mandola solo conseguirán calmar en la dura magnitud de estos horizontes.

SoNna Huesca

Será la quinta participación internacional de la tercera edición, tras los conciertos, entre otros, de Sofía Rei (Argentina), Flor de Toloache (México) o Rumbo Tumba (Argentina). En este caso, el escenario elegido es el Mirador del Saso de Lanaja, a medio camino entre Sariñena y la sierra de Alcubierre. Nos encontramos en la partida denominada Cabezo del Saso del Molino, situada a unos 370 metros de altura, sobre la bóveda del pozo de hielo de la localidad, situado en un promontorio al norte de la localidad.