Foto: imagen del salto del Cinqueta, este jueves. Sobrarbe Digital
La explotación de las aguas del Cinqueta comenzó en 1930 con la construcción del embalse de Plandescún y un canal de unos 8 kilómetros de longitud.
Atravesando punta Llerga mediante un túnel de 3,5 kilómetros llega al depósito de extremidad y al salto de agua sobre Lafortunada, que tiene un desnivel de 345 metros. Fuente: Archivo de Iberdrola. Ricobayo.
El aprovechamiento del Cinca fue construido por Hidroeléctrica Ibérica para suministrar energía a Bilbao con 6 centrales: Urdiceto, Barrosa, Bielsa, Lafortunada Cinca, Lafortunada Cinqueta, Salinas y Laspuña; y se completó más tarde con las 3 centrales construidas por ENHER en las presas de la Confederación Hidrográfica del Ebro de Mediano y El Grado.
Las centrales de Hidroeléctrica Ibérica, con una potencia total de 111,2 MW, iniciaron el suministro a Bilbao el año 1923. La redacción del proyecto se había iniciado en 1917 y las obras comenzaron en 1918. Hubo más de 1.000 personas trabajando, debiendo empezar por construir carreteras para acceder a los emplazamientos de las presas.
La central más importante es el conjunto de Lafortunada, que tiene dos tomas, en los ríos Cinca y Cinqueta, pero cuya maquinaria está en un edificio único.