Imagen reciente de Bielsa. Foto: SobrarbeDigital.
El cortometraje de animación inspirado en las creencias populares de los Pirineos, Lo Gorrorroi, narra en castellano y aragonés una historia del valle de Bielsa, cuyos vecinos se han volcado desde el primer momento, que aparece convertida en aventura a través de la mirada de uno de los traviesos y diminutos seres mágicos que cuentan han habitado esta zona. La proyección se podrá ver este miércoles, día 3 de enero en el Palacio de Congresos de Jaca
Es la primera película de animación en aragonés y también la primera dirigida por Saúl M. Irigaray con los textos de Chusé Usón. Juntos se volcaron en esta singular travesía que, como al propio Tricolotrato, los ha llevado muy lejos. La idea nacía originalmente para convertirse en un libro que, con el mismo nombre, vio la luz el año pasado bajo el sello de la editorial Garabato Books.
Apenas pasado un año, esta pequeña historia se hace grande y da el salto a la gran pantalla. El corto tiene una duración de alrededor de 10 minutos. Lo Gorrorroi, se proyecto en el salón de actos de la Diputación Provincial de Huesca (DPH) y también se se pudo ver en Bielsa hace unos días.
Las ilustraciones de Irigaray, cuyos orígenes está en Sobrarbe, han cobrado vida unos meses después de la publicación del cuento gracias al talento de Patricia Sánchez, alumna de la Escuela de Arte de Zaragoza, donde se presentó la semana pasada. Ella se ha encargado de la parte técnica de la animación y el músico y productor oscense Nacho Moya del sonido. El equipo, acompañado por la responsable de Cultura de la Diputación de Huesca, Berta Fernández, y el director general de Política Lingüística del Gobierno de Aragón, José Ignacio López, que narraron el proceso de creación de esta cinta.
Lo Gorrorroi es un trabajo coral hecho en Bielsa y por sus gentes, dos de los hablantes de belsetán que todavía quedan ponen la voz, pero también están presentes niños del municipio y el grupo de música.
Saúl M. Irigaray. Foto: SobrarbeDigital
Lo Gorrorroi, es el primer trabajo dirigido por Saúl M. Irigaray con textos de Chusé Usón y animación de Patricia Sánchez, dando como resultado una animación en aragonés que hasta ahora no existía, donde toman el protagonismo seres mágicos del Pirineo y episodios de la memoria de la provincia que obligaron a muchas familias a cruzar la frontera.