La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha iniciado este martes las crecidas controladas en los ríos Noguera Pallaresa y Cinca, desde los embalses de Camarasa (Lleida) y El Grado (Huesca). Se han iniciado a las 8h y se van a mantener durante 12h, con 120 metros cúbicos por segundo de salida (5hm3) y 400 metros cúbicos por segundo (18hm3), respectivamente. 400 cc2 por segundo.
Van acompañadas de un pequeño desembalse en Flix, en el río Ebro, con el objetivo de que este miércoles 20 de septiembre, hacia las 8h, lleguen al embalse de Ribarroja las crecidas procedentes de los ríos Segre y del Cinca, con un caudal esperado de 550 m3/s.
El jueves 21 de noviembre, a las 8h, está previsto iniciar otra crecida controlada desde el embalse de Mequinenza, de 1400 m3/s durante 8 horas (40 hm3).
Hacia las 16h del jueves finaliza toda la operación de crecidas.
La maniobra se realiza en colaboración con la ACA, ENDESA, MITECO, CEDEX, Universidad de Lleida, Universidad Politécnica de Cataluña, Universidad de Valencia, Universidad Politécnica de Madrid, SPESA y TRAGSA.
Las crecidas controladas, aprovechando las crecidas naturales de los días pasados y la abundancia de caudales, tienen como objetivo dotar a los ríos de caudales generadores que garanticen sus ecosistemas, y forman parte tanto del Plan Hidrológico del Ebro como de la estrategia GISDHE de gestión integral de sedimentos.
Los caudales generadores tienen como objetivo mantener y regular la estructura geomorfológica de los cauces, evitando su progresivo estrechamiento, así como la colonización de las riberas por especies arbóreas favoreciendo también el transporte de sedimentos y materia orgánica.