El salón Tanto Monta de la seo oscense se ha llenado de público para admirar los cantorales de la Catedral de Huesca, con miniaturas realizadas entre finales del siglo XV y hasta el el XVIII, que hacen de ellos la colección histórica más importante de libros de canto llano que existe en los archivos aragoneses.

Ha sido el presidente de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), Miguel Gracia, quien inauguraba la actividad cultural de este espacio recién rehabilitado haciendo referencia a lo pertinente y armónico con el contenido de la exposición, “por primera vez se pueden ver la práctica totalidad de estos cantorales en un espacio tan extraordinario y lleno de historia, una de las joyas patrimoniales de esta ciudad”, ha destacado. Para Gracia la importancia radica en que “la coordinación entre instituciones ha hecho posible recuperar y saber más del patrimonio que tenemos”.

En palabras de la obispo de la Diócesis de Huesca, Julián Ruiz, quien se mostraba agradecido de que haya podido ver la luz, hablaba de la música como “muestra de sentimientos y vivencias” y ha dicho que descubrir estos cantorales es “reencontrarnos con las raíces de nuestra historia y con nosotros mismos”.

Los libros de canto llano son volúmenes manuscritos que tienen grandes dimensiones para que el texto, la notación musical y las iluminaciones pudieran ser vistos por los cantores desde sus asientos, dada la distancia que los separaba del lugar donde se colocaban los cantorales, que estaba situado en el centro del coro.

Los cantorales ponían color a la música, de la misma forma que lo va hacer en el recién restaurado salón del Tanto Monta y esta rica producción artística al conocimiento del patrimonio aragonés.

Salón del Tanto Monta, antiguo palacio episcopal de Huesca.
La exposición se puede visitar hasta el 31 de marzo de 2018.
De martes a sábado, de 17:30 a 19:30 horas. Domingos, de 11:30 a 13:30 horas.

Fotos: Pablo Otín

En la inauguración también han estado presentes el concejal del Ayuntamiento de Huesca, Antonio Sanclemente, la diputada de Cultura, Berta Fernández, el director del Instituto de Estudios Altoaragoneses, Fernando Alvira, el director del Museo Diocesano, José María Nasarre, o el deán de la Catedral, Juan Carlos Barón, además de la historiadora y comisaria de la exposición, Carmen Morte, quien destacada el valor incalculable de estas piezas. Morte ha explicado al público cómo las primeras constituciones jerónimas recogen la importancia del canto en el coro “y también los cronistas y los historiadores de la orden insistieron en su significado para unos monjes que dedicaban hasta ocho horas diarias”.

Organizado por el por el Instituto de Estudios Altoaragoneses y área de Cultura de la área de Cultura de la DPH, en colaboración con la Catedral de Huesca y el Museo Diocesano.