Foto: SobrarbeDigital.

Superado el ecuador del XVII Festival Internacional de Documental Etnográfico de Sobrarbe, más de 4.000 personas han pasado por el Palacio de Congresos de Boltaña, donde han asistido a las proyecciones de documentales, coloquios, entrevistas, entre otras de las más de 25 actividades de las que han podido disfrutar.

Además, a este público hay que sumar el de la ciudad mexicana de Zacatecas, donde el festival cuenta con una nueva sede. Desde ayer, los zacatecanos ven los documentales de la sección Concurso que se exhiben en Boltaña mediante conexión en directo, que se ajusta a la diferencia horaria.

Foto enviada desde México

Este miércoles, a las 22:00 horas, se exhibirá Otiñar, un pueblo con amo, de José Miguel Tudela (España), una historia que gira en torno al último descendiente de una familia de colonos que ha poblado Otiñar durante los dos últimos siglos. La obra de Tudela también opta al premio Espiello Pirineos.

El martes se proyectó Das versunkene dorf/ El pueblo hundido, de Georg Lembergh. Se trata de una producción italo-austríaca que se estrena hoy en España y en la que el director da voz a los últimos testigos contemporáneos de la tragedia que sufrieron en el Tirol del Sur las localidades de Graun y Reschen en 1950 cuando ambas aldeas quedaron sumergidas por las aguas de la presa en Resia. Este documental opta al premio Espiello Pirineos.

Con el inicio del festival comenzaron a llegar los primeros directores de los 21 documentales finalistas. En total, está prevista la asistencia de 14 realizadores.